Una librería de viejo atestada de volúmenes de segunda mano, un anciano ácrata con un perturbador pasado y un librero al que el hastío vital le lleva a dejarse involucrar en cuanto surge una oportunidad de aventura. Estos son los mimbres con los que el abogado, escritor y colaborador de La Voz y Radio Voz Ignacio Bermúdez de Castro Olavide ha dado vida a su tercera novela, Librería Macondo, que ayer fue distinguida con el premio de literatura y ensayo Fernando Arenas Quintela.
El fallo del jurado se hizo público en la librería Arenas, donde el autor aprovechó para dedicarle esta obra a su padre, Alfredo Bermúdez de Castro Rebellón, fallecido recientemente. Sobre la historia premiada, el escritor aclaró que no se trata de un thriller, como su anterior novela, aunque conserva ciertos elementos del género. La definió como un análisis «del lado oscuro de las relaciones humanas», basado en las turbulentas vivencias de dos personajes «con un amplísimo bagaje cultural y gran preparación intelectual».
Precisamente, Bermúdez de Castro estará esta tarde en Arenas, a las 18.30 horas, firmando ejemplares de El viejo notario, su anterior novela, con motivo del Día del Libro.