Padres y Madres Separados

Ayuda práctica, jurídica y psicológica padres, madres, separados, divorciados e hijos

NUEVO MATRIMONIO: EL GATILLO PARA DISPARAR EL S.A.P.

Richard A Warshak
- University of Texas Southwestern Medical Center at Dallas, Dallas, Texas, USA

Periódico americano de Terapia Familiar. Número 28, pags. 229-241 - Año 2000.

Los esfuerzos de adaptación para ajustarse a un segundo matrimonio pueden provocar o exacerbar el Síndrome de Alienación Parental (PAS).

Publicado el

LOS CELOS Y LAS HERIDAS DEL EGO (NARCISISTAS).

Las relaciones cordiales tras el divorcio no aíslan a los ex esposos de la tensión generada cuando uno de ellos encuentra de nuevo el amor. Los pacientes a menudo se sorprenden de la intensidad de su reacción a la noticia de que un ex esposo planea volverse a casar. Tal vez pensaran que una eventualidad así no les llegaría a afectar, pero en vez de eso, vuelven a re experimentar mucho del dolor y la rabia que acompañó al divorcio.

Aquellos que ignoraban mantener cualquier vínculo emocional residual al ex esposo o que ignoraban albergar fantasías de reconciliación tienen más probabilidades de tener dificultades en atajar los celos y las heridas que el nuevo matrimonio inflige a su ego. Más que el reconocimiento de la fuente de estos sentimientos que ellos estiman no deseados o inapropiados, los que los padecen se aplican a utilizar una variada gama de defensas.

Una maniobra muy recurrente consiste en manifestar que la propia rabia surge de la preocupación sobre los trastornos que el nuevo matrimonio puede causar a los hijos. Wilhelm Reich (1949) llamó a esto un "motivo fingido". Los terapeutas pueden reconocer este tipo de racionalización cuando un padre dice "no me importa lo que ella quiera hacer con su vida.

Pero mis hijos están muy trastornados por todo . Si los niños no han venido mostrando signos de tensión, hay considerables posibilidades de que el progenitor esté o bien intentando racionalizar su propia angustia o bien proyectándola en los niños y distorsionando su percepción sobre sus verdaderas reacciones.

Otra racionalización consiste en manifestar que a uno no le afecta ese matrimonio en sí, sino el carácter específico del padrastro, o su modo de relacionarse con los niños. El Síndrome de Alienación Parental entra en juego cuando un padre canaliza los indeseados, desagradables y confusos sentimientos desatados por el matrimonio del ex- cónyuge en una despiadada denigración del ex-esposo y su nueva pareja.

Como Reich reconoció (1949), "el verdadero motivo es la venganza de la pareja, robándole el placer del hijo" [p. 265]. "La carencia de cualquier consideración hacia el niño se expresa en el hecho de que el amor del niño por el otro miembro de la pareja no se tiene en cuenta en absoluto" [p. 265].

Como sucede en la mayor parte de los casos de racionalización, proyección y desplazamiento, facilitar la toma de conciencia, la aceptación y la expresión adecuada de los sentimientos genuinos pueden obviar la necesidad de la derivación destructiva. Los padres deben ser ayudados a reconocer los sentimientos de vínculo residuales. Esto será más sencillo si el terapeuta contempla genuinamente tales sentimientos entre ex-esposos como algo normal.

Los terapeutas que creen que cualquier signo de conexión emocional entre los esposos india que la pareja está evadiendo la realidad del divorcio y que no están "emocionalmente divorciados" exacerbarán el problema (Warshak, 1992). Los sentimientos de vínculo no crean el problema: el problema se da cuando tales sentimientos no son asumidos y se reconducen a través de un comportamiento destructivo. El terapeuta puede asistir a los padres en la respuesta adecuada al nuevo matrimonio, invitándoles a imaginar como querrían que reaccionara su antigua pareja a su propio anuncio de un nuevo matrimonio.

Naturalmente, cuando una campaña de denigración está arraigada sobre la creencia de que la nueva pareja ha contribuido al divorcio, será aún más difícil sobre el progenitor alienador rendir sus deseos de venganza.

En este punto, las reacciones del progenitor que conoce los planes de su antigua pareja para casarse ya se han tratado. Pero como veremos a continuación, la crítica destructiva puede proceder igualmente del progenitor que se casa y de su nueva pareja. En nuestro trabajo con familias de nuevo matrimonio identificamos tres dinámicas claves , adicionales a la búsqueda de la venganza que, a menudo, desata los intentos para alejar al niño del otro padre.

1.- El deseo de eliminar la influencia del otro padre en la vida del hijo, para "hacerle hueco" al padrastro.

2.- Sentimientos de competitividad entre el ex esposo y el padrastro.

3.- Los intentos de la nueva pareja de unirse frente a un enemigo común.

Estas dinámicas se discutirán separadamente por razones heurísticas. Pero está claro que no son mutuamente excluyentes y que de hecho a menudo están interrelacionadas. Tampoco agotan todas las posibles dinámicas vinculadas al PAS que se producen en el seno de familias de nuevo matrimonio.