Comentarios a dos sentencias de Custodia para padres
En los últimos días hemos tenido conocimiento de dos sentencias de las audiencias de Tenerife y Barcelona, en las cuales se les otorga a los padres la guarda y custodia de los hijos a causa de los horarios laborales de las madres.
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Sr. Director:
En relación a la noticia divulgada por su periódico acerca de la pérdida de la custodia de sus dos hijos por parte de una madre deseamos hacerle las siguientes consideraciones:
- Que lamentamos profundamente la situación de dicha madre, producto de la custodia monoparental que es costumbre aplicar en nuestro país en casos de separación/divorcio, estimando que la misma no se hubiera producido si se hubiera adoptado en España una legislación de divorcio mas moderna que incluya la Custodia Compartida, la cual además posibilita por igual el trabajo de ambos cónyuges tras una separación.
- Que asimismo estimamos que el bienestar y derechos de los dos niños, en la base de las resoluciones judiciales adoptadas, se asegura mucho mejor con dicha Custodia Compartida, al poder disfrutar equitativamente de ambos padres, tal y como demuestra la experiencia de los países ( Francia, Canadá, Noruega entre otros) que han adoptado esa legislación que reclamamos.
- Que esa misma situación que “sorprende e indigna” a Dña Rosa Dávila, directora del Instituto Canario de la Mujer, afecta diariamente a multitud de padres y sus hijos, incluyendo a los que aquí tratamos que han sufrido simplemente un cambio de custodia, casos a los cuales le exigimos que extienda su indignación, y medidas de apoyo..
Y digo exigimos porque al ser funcionaria pública pagada con dinero público, está obligada a conocer y respetar la no discriminación por razón de sexo sancionada en el artículo 14 de nuestra Carta Magna.
- Que no obstante, este caso, al igual que otros similares que afectan mayoritariamente a hombres, lo único que señalan es la necesidad del cambio de nuestra obsoleta ley de divorcio, a fin de eliminar de raíz tales situaciones (muchas veces fuente de gran violencia) y fomentar por igual el respeto a los derechos de todas los implicados.
¿Sr. Director: seremos otra vez los últimos en adoptar una legislación racional?
¨Reciba usted un cordial saludo