Quiéreme, no me mimes
La "sobreprotección" de los padres provoca que los niños sean "dependientes o déspotas", según Aprime
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Además, la presidenta de Aprime aseguró que esta actitud de los padres se manifiesta en diferentes aspectos de la vida, como en la mala educación alimentaria y en el excesivo consumo de productos de ocio.
En este sentido, afirmó que "el exceso de estímulos apaga el deseo de los adolescentes y que es bueno que los niños tengan momentos para saber lo que es aburrirse, de manera que sean ellos los que los ocupen con la lectura u otras actividades".
Añadió que "los padres se empeñan en llenarles todo el tiempo y eso acentúa la dependencia de los menores, dificulta su madurez y provoca que el menor no asuma riesgos o se arriesgue demasiado, así como que estructure mal su tiempo, derivando en una persona que se agobia de todo o que es pasiva ante cualquier experiencia".
TELEVISION, VIDEOJUEGOS E INTERNET
Por otra parte, Pons incidió en la "paradoja" de la sobreprotección respecto a la dependencia que los niños tienen de la televisión, los videojuegos o internet, ya que "los padres, muchas veces, por no pelear con sus hijos les permiten estar delante de la pantalla sin saber lo que ven o hacen".
Asimismo, destacó que los padres cada vez tenemos menos tiempo para pasar con nuestros hijo, lo que, unido a la baja natalidad, hace que protejamos en exceso a los menores, y que les permitamos hacer lo que quieren".
En esta línea, señaló que "es necesario que los padres supervisen los contenidos que sus hijos consumen a través de la televisión, los videojuegos o internet" y agregó que "no se trata sólo de hacerles cambiar el canal cuando aparece alguna escena violenta, sino de acompañarles mientras juegan y enseñarles a discriminar qué es positivo o negativo para ellos".
RESPONSABILIDAD SUBSIDIARIA DE LOS PADRES
Por otra parte, con motivo del Día Internacional de los Derechos de la Infancia, López recordó algunas de las reivindicaciones jurídicas de Aprime, como la privación de la patria potestad a los padres que abusen sexualmente de sus hijos, la defensa de la guardia y custodia compartida y la exigencia de la responsabilidad civil subsidiaria para los padres que se desentienden del cuidado y la educación de los menores, dejándolos en manos de las instituciones públicas.
Preguntada por el caso de Elche (Alicante), en el que una jueza concedió una indemnización a una joven que denunció a su padre por falta de afecto, señaló que le parece una decisión judicial "muy acertada", aunque lamentó que "en muchos casos haya chicos y chicas que no se atrevan a dar este paso".
Asimismo, destacó su preocupación sobre varias cuestiones como el número creciente de demandas a la fiscalía de menores sobre casos de trastornos mentales, ligados la mayoría de las veces al consumo de sustancias adictivas y a los juegos violentos; el trato de los niños en los medios de comunicación; la victimización de los niños en los juicios y las adopciones internacionales.
En este sentido, afirmó que "el exceso de estímulos apaga el deseo de los adolescentes y que es bueno que los niños tengan momentos para saber lo que es aburrirse, de manera que sean ellos los que los ocupen con la lectura u otras actividades".
Añadió que "los padres se empeñan en llenarles todo el tiempo y eso acentúa la dependencia de los menores, dificulta su madurez y provoca que el menor no asuma riesgos o se arriesgue demasiado, así como que estructure mal su tiempo, derivando en una persona que se agobia de todo o que es pasiva ante cualquier experiencia".
TELEVISION, VIDEOJUEGOS E INTERNET
Por otra parte, Pons incidió en la "paradoja" de la sobreprotección respecto a la dependencia que los niños tienen de la televisión, los videojuegos o internet, ya que "los padres, muchas veces, por no pelear con sus hijos les permiten estar delante de la pantalla sin saber lo que ven o hacen".
Asimismo, destacó que los padres cada vez tenemos menos tiempo para pasar con nuestros hijo, lo que, unido a la baja natalidad, hace que protejamos en exceso a los menores, y que les permitamos hacer lo que quieren".
En esta línea, señaló que "es necesario que los padres supervisen los contenidos que sus hijos consumen a través de la televisión, los videojuegos o internet" y agregó que "no se trata sólo de hacerles cambiar el canal cuando aparece alguna escena violenta, sino de acompañarles mientras juegan y enseñarles a discriminar qué es positivo o negativo para ellos".
RESPONSABILIDAD SUBSIDIARIA DE LOS PADRES
Por otra parte, con motivo del Día Internacional de los Derechos de la Infancia, López recordó algunas de las reivindicaciones jurídicas de Aprime, como la privación de la patria potestad a los padres que abusen sexualmente de sus hijos, la defensa de la guardia y custodia compartida y la exigencia de la responsabilidad civil subsidiaria para los padres que se desentienden del cuidado y la educación de los menores, dejándolos en manos de las instituciones públicas.
Preguntada por el caso de Elche (Alicante), en el que una jueza concedió una indemnización a una joven que denunció a su padre por falta de afecto, señaló que le parece una decisión judicial "muy acertada", aunque lamentó que "en muchos casos haya chicos y chicas que no se atrevan a dar este paso".
Asimismo, destacó su preocupación sobre varias cuestiones como el número creciente de demandas a la fiscalía de menores sobre casos de trastornos mentales, ligados la mayoría de las veces al consumo de sustancias adictivas y a los juegos violentos; el trato de los niños en los medios de comunicación; la victimización de los niños en los juicios y las adopciones internacionales.